Un incendio de maleza en la zona arqueológica de Aké, perteneciente a Tixkokob, puso en alerta a los habitantes de los sitios cercanos por la gruesa columna de humo que generó este hecho.
Se dio el aviso a las autoridades correspondientes, y en este momento bomberos y personal de Protección Civil atacan las llamas para sofocarlas a la brevedad posible y evitar que se extiendan aún más.

Se desconoce cómo inició todo, pero se presume que, como ocurre comúnmente en este tipo de casos, fue un “efecto botella”, es decir, un pedazo de vidrio pudo haber concentrado los rayos solares haciendo aparecer el fuego.
También se desconoce si las llamas han causado algún daño a los vestigios arqueológicos.
